¿Pequeñas y medianas empresas a la búsqueda activa de tiendas sin caja?

En enero de 2018 Amazon abrió su primera tienda Amazon Go en Seattle, lo que provocó entusiasmo en el sector y largas filas en la puerta. Desde entonces, le siguieron más de 40 tiendas más. Para muchos consumidores, poder entrar, elegir lo que les gustaba y salir les parecía algo fresco e innovador.

Los cajeros de pago rápido existen desde hace tiempo, pero rara vez se ha eliminado por completo la necesidad de pasar por caja. A menudo, el trabajo se transfería simplemente a los compradores, como hemos visto en las zonas especiales de “autopago “.

Pero los minoristas de todo el mundo también lanzaron sus versiones de tiendas sin cajas, desde grandes minoristas a tiendas de descuento, al parecer con resultados variados, ya que las cifras siguen siendo reducidas y algunas tiendas incluso han vuelto a las tradicionales líneas de caja.

Entonces, ¿es una moda?

Parece que el checkout-free o “pago sin cajas” se va a quedar para siempre. A pesar de su atractivo técnico futurista y su alto nivel de comodidad, aún no hemos llegado a ese punto. Por supuesto, la tecnología está evolucionando y mejorando, lo que hará que el concepto sea más asequible y fiable para los minoristas. Sin embargo, hay algunas tendencias del mercado que los conceptos de pago sin caja deben abordar y sobre las que deben mantenerse alerta, como la privacidad de los datos. Sobre todo cuando se utiliza inteligencia artificial para identificar a los compradores mediante reconocimiento facial, patrones corporales o de movimiento y similares.

¿Las pequeñas y medianas empresas necesitan sumarse a la tendencia? 

En este momento, el costo de las operaciones sin pago probablemente estará en el extremo superior, lo que indicaría que se desea un alto grado de rotación de productos. Sin embargo, más allá del factor novedad, una tienda sin pago también deberá ser lo suficientemente atractiva como para atraer clientes. Esto indicaría que los productos interesantes tienen posibilidades de ser listados, sin embargo, corren el riesgo de ser eliminados de esas tiendas con bastante rapidez.

Además, el número relativamente bajo de tiendas sin pago en comparación con los supermercados “regulares” en este momento no haría del canal una prioridad desde una perspectiva de facturación. Sin embargo, si el concepto futurista encaja con la imagen de un fabricante pequeño y mediano, estar en la lista puede tener sentido. En estos casos, demostrar en las negociaciones que un producto es un gran ajuste, tanto por el atractivo del producto como por una alta frecuencia de ventas, será clave.

En conclusión, el sistema de pago sin caja acabará creciendo. Las PyMEs que quieran figurar específicamente en una tienda ahora deben tener una historia convincente y respaldada por datos para amplificar sus posibilidades.

Y para los que no buscan figurar en una tienda sin pasar por caja: El análisis basado en datos de sus canales minoristas puede ayudarle a encontrar oportunidades de crecimiento para su próxima planificación estratégica.