Análisis

Nuevos factores que definen el consumo en Costa Rica

Análisis

Nuevos factores que definen el consumo en Costa Rica



Es de conocimiento que, durante los últimos años, el consumo masivo presenta desafíos de coyuntura y reacomodamientos a nuevas bases en general en todo el mundo.

Específicamente en Costa Rica, los consumidores parecen más confiados acerca de las acciones del gobierno y las oportunidades de trabajo futuras a medida que disminuyen los niveles de pobreza. Sin embargo, los consumidores todavía tienen niveles de incertidumbre para el futuro dado que tienen altos niveles de deuda personal, además de los aumentos que se presentan en los precios del petróleo y los combustibles.

Según nuestra última encuesta de Confianza del Consumidor, los costarricenses son cautelosos con sus finanzas personales, reasignando el ingreso discrecional entre los gastos del hogar. Esto se destaca dentro de sus presupuestos de comestibles, ya que toman decisiones más inteligentes, lo que resulta en ventas de volumen positivo a pesar de disminuciones de valor.

El comportamiento de compra está evolucionando en este entorno, con la mayoría de los compradores buscando mejores precios a través de promociones, aumentando las visitas de compras a los supermercados para asegurarse de que no pierdan las ofertas, además de buscar tamaños económicos más grandes que ofrezcan un ahorro por volumen.

Por otra parte, los consumidores también realizan compras en el comercio tradicional, escogiendo empaque más pequeños a un menor desembolso. Otro comportamiento clave del consumidor costarricense, destinado a ahorrar dinero, es cambiarse a marcas de abarrotes más baratas, reduciendo el consumo de productos líderes, lo que impulsa el aumento del consumo de presentaciones con un precio medio.

En este contexto local, es importante no perder la perspectiva de las tendencias macro/regionales que influyen de forma significativa en los nuevos comportamientos del consumidor, y para las que Costa Rica no es la excepción.

Tecnología
Es innegable que la tecnología se encuentra inmersa en la mayoría de los aspectos de nuestra vida, y los consumidores la utilizan para que sus compras sean mucho más fáciles y, a su vez, puedan ahorrar en tiempo y costos. Hay datos concretos acerca de esta tendencia: más del 45% de los latinoamericanos buscan información de los productos a adquirir previo a la compra, mientras que un 33% también se encarga de buscar descuentos. Otro dato que llama la atención es ya en el punto de venta, donde más de un 30% de los latinos utiliza las redes sociales para ayudarse a tomar decisiones de compra. A su vez, el comercio electrónico también viene pisando fuerte y hay ciertas categorías que viene creciendo y alcanzando a las ya más tradicionales, como viajes y tickets para evento. Así es que encontramos que, por ejemplo, el 44% de los latinos encuestados ya ha comprado alguna vez indumentaria de forma online, y un 24% ha adquirido muebles y elementos de decoración por esta vía. Y desde ya que estas tendencias seguirán avanzando en el tiempo junto con las generaciones, pero todavía hoy hay algunas barreras. Por ejemplo, la preocupación por la compra de productos frescos, ya que no se tiene seguridad sobre las fechas de vencimiento o su frescura, la calidad o el temor por no recibir los productos seleccionados, indicadas los encuestados. Entonces, sin importar a qué industria pertenezcan, los fabricantes y también los comercios detallistas deberán diseñar nuevas estrategias que involucren a la tecnología como parte fundamental de la experiencia de compra y logren avanzar por sobre estas limitantes.

Conveniencia
Por otra parte, y siguiendo el ritmo de vida acelerado que hoy todos afrontamos, los consumidores buscan la conveniencia en todo. En este sentido, hay muchos factores que hacen a una compra conveniente. En primer lugar, la proximidad es una variable clave; la migración hacia este tipo de canales se comienza a ver en todas las familias de productos y, según informes realizados por NielsenIQ, el 93% de los latinos afirma que una localización conveniente es muy influyente en su decisión de comprar en una tienda u otra. Otro de los factores que hace a la conveniencia tiene que ver con las facilidades que el lugar de compra ofrece. Por ejemplo, filas cortas o cajas rápidas, diseños de góndolas que faciliten y optimicen la compra y la oferta de alimentos frescos o recién preparados. Podemos observar también que, en los últimos 15 años, el modelo de tienda del canal moderno ha evolucionado hacia espacios más pequeños, con los productos y servicios necesarios para el momento de la compra.

Consciencia saludable
Por último, la consciencia de salud, bienestar y responsabilidad social es, definitivamente, otro de los factores que definen hoy al consumidor. La gente presta más atención a los ingredientes del producto en su búsqueda por una alimentación más saludable, y está dispuesto a pagar aún más. De ahí la importancia que tanto los fabricantes como los comercios detallistas se unan a sus consumidores en el desarrollo de actividades que fomenten la sustentabilidad, junto con ser cada vez más transparentes en la información de sus productos y servicios.

Entonces, para poder hacer frente al contexto actual, el sector deberá analizar todas las variables, 100% interrelacionadas entre sí, y lograr entender al nuevo consumidor costarricense para poder ofrecerle la experiencia de compra que realmente espera.